viernes, 13 de septiembre de 2013

Fuerza de voluntad algo floja

Son las 3 de la mañana y tengo ganas de dar por culo.


Mirad esa tira “cómica”. ¿No os sentís identificados? La mayoría deberíais.

¿Por qué? Bueno, pues porque sois el vivo reflejo del yonki del teléfono y las redes sociales.

Os llenáis la boca (virtual) de palabras bonitas. “Dile a alguien que le quieres porque mañana podría ser demasiado tarde” rezan vuestros muros. ¿Cuántos les habéis dicho a alguien que le queríais sin esperar nada a cambio? ¿Sin esperar un “yo también” como respuesta?

¿Y de las metas de la vida? “Yo quiero trabajar de tal cosa”. ¿Qué esfuerzo real le habéis dedicado, los que en épocas de exámenes no os desengancháis de nada, no os perdéis una juerga y vais al examen morenos color caoba? ¿Dónde está vuestro esfuerzo y dedicación?

“Hay que ser fuerte en la vida”. Muy bien, muy bonito. ¿Qué haces tú por tu vida, más allá de la autocompasión? Nadie va a arreglar tu vida. Vas a contar con todo el apoyo que necesites de la gente que verdaderamente va a estar ahí. Pero el camino lo tienes que andar tú. Y ahí estás, parado, lamentándote de ti mismo.

¿Qué a mí me salen las cosas bien? Pues claro que me salen bien. Cuando tengo que estudiar, estudio, no hago el idiota por internet. Cuando tengo que superar un obstáculo, me apoyo en mis amigos, no relego en ellos la responsabilidad. Y sí, he sido tan idiota de decirle a alguien que le quería sin esperar un “yo también” a cambio. Y me he llevado cada respuesta que ni os la cuento, que bastante ridículo he hecho ya.

¿Quieres seguir lamentándote? Bien. No te voy a quitar yo ese dudoso placer. Pero recuerda: si no consigues lo que quieres (ser feliz, sacar unos estudios, lo que sea), la principal razón eres tú. Y esto os lo digo a pocos días de saber si soy licenciado o no. Porque si hay algo que estoy seguro que me ha llevado hasta aquí soy yo. Me he apoyado en amigos y familiares, pero a veces la decisión difícil es simplemente decirle a alguien “necesito ayuda con esto”. Pero claro, eso conlleva al hoy por mí, mañana por ti, que no nos va tampoco demasiado…


En fin, son las 3 de la mañana y no puedo dormir. No es buena hora para escribir.

martes, 3 de septiembre de 2013

Lunes 2 de septiembre, un día clave

Interrumpo mi abstinencia porque hoy ha sido un día peculiar.

Hoy he acabado las que hasta ahora han sido las clases particulares más gratificantes que he dado, y el listón no está bajo. Pero, como muchos sabéis, me quiero doctorar en análisis funcional, y para alguien como yo, tener la oportunidad de dar clases de una materia tan avanzada y que encima te gusta, no tiene precio. Por si fuera poco, mi alumno me ha hecho un pequeño regalo de despedida. Gracias a gente como él consigo olvidar a gente tan poco comprometida como todos los demás que me iban a llamar en verano y no supe nada de ellos.

Hoy va por ti, Juan. Espero que tengas mucha suerte mañana, porque desde luego mereces aprobar y a lo grande.

Además, un día como hoy, a estas alturas ya, tendré una buena idea de si soy licenciado o no. Mi examen es el día 9, y lo espero a la vez con ansias y miedo. Llevo una preparación espectacular gracias a la inestimable ayuda de Lolo, que además de buena persona y mejor amigo, ha sido un profesor como, simplemente, no los hay. Además, voy a tener el placer de colaborar con él en revisar, ampliar y publicar sus apuntes de EDP.

Así da gusto hacer matemáticas. Apruebe o no, gracias Lolo. He disfrutado del camino independientemente de cómo sea el final.

Ahora me queda una semana muy dura, de mucho trabajo y mucho estudio, quizás más de lo que he tenido que hacer en toda mi vida. Y creedme que en Alemania trabajé infatigablemente, al igual que en Sevilla. Pero esta vez es distinto. La recompensa ahora es el mayor paso de lo que llevo de vida, por lo que no se admiten traspiés. Comienza la recta final y esta vez ganaré.

Gracias a todos los que me estáis mostrando apoyo en estos momentos. Para mí es más importante de lo que parece o expreso. Gracias a todos los que me saludan, me hablan para quedar para tomar algo o cenar, o simplemente me saludan por algún chat. Nos veremos pronto, y con un buen motivo de celebración.